Identidad




Es una lucha incesante
la que mantiene el periurbano
contra el tiempo
por sostener su identidad amenazada
en permanente cambio
y movimiento
a punto siempre
de alterar su forma
y transformarse en algo nuevo:
un circuito de golf para iniciados
una agencia de autos alemanes
otro barrio cerrado  
un vertedero
expresiones sustanciales
de un mercado vigoroso
en franco ascenso
que remata los campos
por porciones
con carteles de colores
que aseguran:
“gran oportunidad”
“excelente suelo”.

Es una lucha incesante
la que mantiene el periurbano
contra el dueño
de su destino de tierra a la deriva
siempre dócil
para el molde los sueños
de los iluminados
los especuladores
y los inversionistas
que aguardan a que el pueblo
se retire
extiendan unos metros
la autopista
y cuando llegue la hora
anuncien el banquete del progreso
mordiendo la pradera
con sus excavadoras.

Es una lucha incesante
la que mantiene el periurbano
contra aquellos
que ganaron la batalla
sin desmedro
del pellejo
y proyectan satisfechos
paraísos asequibles 
para un futuro sin techo
refugios indiscutibles
del sujeto 
hecho y derecho
y prometen
siempre prometen:
el campo
las plantas
las vaquitas
la vida sencilla
del hombre de pueblo.

2 comentarios:

  1. Considerandos para una ordenanza sin tiempo. abrazo Mauro!

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  2. Gracias, Pablo. Qué sería de nosotros sin lectores? Abrazo.

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